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Poema Recordando A William Blake de Virgilio López Lemus



Tigre, tigre:
El poeta está sobre las ramas.
Allí lo veo como un ángel cotidiano.
El poeta vive sobre esas ramas verdes
o está tratando de vivir como quien pone
el pie en la tierra y el otro en lo infinito.

La eternidad, el tiempo todo, eres tú: tigre, tigre.
Dios mismo está en las rayas de tu traje.
Eres fiero como un ángel defendiéndose en el mundo.

El poeta no desciende sino para quedar dormido.
Y cuando duerme,
salta el tigre.

Hay un tigre en las ramas.
Hay un tigre sobre el árbol.
Hay un poeta dispuesto a saltar
hacia la presa,
el abismo,
la poesía,
el infinito.



Poema Regreso de Luis Zalamea Borda



Acabas de llegar.
Cruzaste, en solitaria caravana, un desierto de sábanas,
las venas en sus múltiples ramas abrazando.
Atrás están quedando los montes calcinados;
la saeta que rompe la ventana del yodo;
la larga enredadera de los nervios;
el muelle negro donde los sueños de la noche zarpan.
y ya no escuchas las voces del mundo de fantasmas.

Estás radiante, nueva, completa, y hasta un poco celeste,
al emerger del reino prohibido de las sombras.
Estás triunfante, diáfana, infantil y hasta un poco felina.
Lo fosco de la noche en ti fue derritiéndose,
olvidada la pena aguda de tu entraña.

Surge la única voz, con la esperanza;
la cortina incitante que descorre el mañana,
el fruto nuevo del dolor, tan bienamado,
y la centella poderosa de tu grito,

no ya de soledad ni de pavor ni hielo:
de entera dicha sin baldón ni frío.

Hasta encontrarte incólume,
espérame, triunfante, a la otra orilla del dolor.



Poema Recuerda La Olvidada Belleza de William Butler Yeats



Al ceñirte en mis brazos,
estrecho contra mi corazón esa belleza
que del mundo hace mucho se marchara:
coronas engastadas que reyes arrojaron
en charcas fantasmales, huyendo los ejércitos;
cuentos de amor tejidos con hebras de seda
por soñadoras damas en telas que nutrieron la polilla asesina:
rosas de tiempos idos
que las damas tejieron en sus pelos;
lirios fríos de rocío que las damas portaron
por tanto corredor sagrado,
adonde tales nubes de incienso se elevaban
que sólo Dios estaba con los ojos abiertos:
ya que el pálido pecho, la mano demorada,
nos llegan de otras tierras más pesadas de sueño,
y también de otra hora más pesada de sueño.
Y cuando tú suspiras entre besos
escucho la blanca Belleza también suspirando
por aquella hora cuando todo
deberá consumirse cual rocío.
Mas llama sobre llama y hondura sobre hondura,
y trono sobre trono y medio en sueños,
posadas sus espadas en sus férreas rodillas,
tristemente cavilan sobre grandes misterios solitarios.

Versión d: Hernando Valencia Goelkel



Poema Raiz Eterna de Maruja Vieira



Tú eres más que un rostro,
más que un hermoso cuerpo.

Eres aquel murmullo del río entre la lluvia,
aquella forma vaga del monte tras la niebla.

Profundamente asidos al trémulo paisaje
del sitio de la vida donde habita el recuerdo.

Tú eres más que un nombre.
Más que un paso en la tierra.

Te cerca un bosque denso, de misteriosos árboles.
con pájaros errantes y canciones sin término.

Te guarda entre sus ramas de música, te encierra
lejos de la ceniza destructora del tiempo.

En ti el amor humano, de raíces eternas,
me ha entregado su clave profunda y verdadera.



Poema Rodajas De Limón de Manuel Vázquez Montalbán



Rodajas de limón

zumos de sol, cálido
verano, se digieren
algas
lentas como ahogados, ya
aprendimos el lenguaje
del juke-box, del amor
fox y sobre todo trot, lento
vivo
adagio corazón
caballo
loco, triste se desploma el cuerpo
como en un poema sentimental
o de los otros

¿qué importa ya
el lento rodar de las naranjas,
los senos, los obuses, la bomba,
las cabezas

si canta Paul Anka
la antigua historia de Young Alone?

también lo fuimos
y tal vez por eso
Madre Coraje lleve bikini, cante
espuma sobre el ski acuático
frente a la amenazadora verga
de fabriles chimeneas y cañones
bajo el útero atómico de un B-27

preferible que nos despierten
las sirenas
preferiblemente que húmedamente nos ahoguemos.



Poema Raíces de Julia Uceda



Si ya soy una vela estremecida
colmada por tu viento. Si has llegado
al último escalón. Si me has tomado
por la raíz más honda y más henchida.

Si yo soy ya tu colmo y tu medida
y estás dentro de mí, secreto, hallado.
Si ya sobre la frente me has soplado
para hacerme vivir, ciega y ardida,

antes de irte rompe mis raíces.
Quiero que las arranques, que las trices
al alba con tu mano firme y fuerte.

De no hincarse en tu tierra poderosa
no quiere mi raíz ninguna cosa
si no es andar y andar hacia la muerte.

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Poema Retrato de Poemas de Amor y Románticos



Estaba allí, perfecta, bella,
sin sombra en las pupilas verdes.
El oro, de corona; el transparente nácar,
de túnica; la sonrisa, de aureola.
Bella, perfecta, en pura geometría
de mármol y caricia del sol último.
¿Qué pensamiento, bajo la amplia frente?
¿Qué beso al borde de los labios?
¿Qué imagen, tras los ojos detenidos
en una mariposa del espacio?
Allí, perfecta, bella. Entre los dedos,
un alma de paloma, muerta,
luchando por entrarse hasta su sangre,
y anidar, otra vez, bajo su seno.
En torno, el ángel de la música
se iba, en ocaso, el mar, desvaneciendo.

EUGENIO FLORIT ( Cuba, 1903 – 1989 )



Poema Reloj De Arena de Poemas de Amor y Románticos



Hace un siglo amé a un hombre
y podía sentir su olor lamiendo mis entrañas,
el universo revelado ante mí en el borde de su camisa
-botón por botón caían los misterios del profundo oráculo-
mi destino trazado en su torso.

Hoy descanso en su cuerpo con la cotidianeidad de los sueños perdidos.

Hace un siglo amé a un hombre
pero he perdido el rastro de su piel
el sello de su boca,
aquella cicatriz tan cercana a mi ombligo.
Un dolor incoloro se afirma entre mis lágrimas,
ya no es más ese monstruo que me tragaba adentro.

Es cierto que amé a un hombre
pero hoy sus huellas ya no existen
ni siquiera en el persistente agujero de mi almohada.

ADRIANA ORTEGA ORTIZ ( México, 1966 )



Poema Recuéstate En El Cojín De Mi Ternura de Poemas de Amor y Románticos



Recuéstate en el cojín de mi ternura,
mujer copiada de dolor y rosas,
y dame de tus avispas armoniosas
el azúcar de ayer en agua pura.

Aquí donde un silencio de frescura
se palpa en mi regazo cuando posas,
aterriza el amor en mariposas
tomando de aeropuerto tu figura.

No cambio ser ladrón de tu hermosura,
en este mundo de tan feas cosas,
y explotar tu belleza con usura.

Traslada las avispas armoniosas
del panal de tu piel a la espesura
del bosque de mis manos silenciosas.

ALFREDO SANCHO ( Costa Rica, 1924 )



Poema Renunciamiento de Poemas Autores Varios



Si de nuestro dolor somos los dueños
nadie podrá impedir que yo destruya
mi corazón, para la dicha tuya,
y sacrifique los más caros sueños.

Si de lo nuestro es el dolor la esencia,
tanto más propio cuanto más profundo,
para que tú no sufras ni un segundo
yo he de sufrir por toda mi existencia,

Si el dolor que me hiere es solo mío,
puedo darlo a mi antojo y mi albedrío,
porque tú logres ser feliz, amada.

Que el verdadero amor es darlo todo
pro el amor en sí… y dar de modo
tan simple, cual sin no se diera nada.

JUAN BURGHI ( Uruguay, 1959 )



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