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Poema Cuando De Ti Me Vaya de Francisco Alvarez



Al llegar el momento,
ha de llorar la luna con lágrimas de estrellas
haciendo más oscuro en la noche el firmamento,
pero serán las tuyas más tristes y más bellas.

Cuando llegue el momento se aferrará tu mano
a la mía, intentando retenerme a tu vera,
y maldiciendo al tiempo, inflexible tirano,
que no detuvo el paso en su carrera.

Una serpiente amarga se enroscará en tu pecho,
atenazando el alma con negra incertidumbre.
Qué frío habrá en tu lecho,
qué sola irás entre la muchedumbre.

Mas quedará el recuerdo de los días brillantes,
de las noches rojizas
en que fuimos amantes,
y el fuego estará vivo en las cenizas.

Y habrá un faro en la costa destellando
chorros de luces sobre el mar inquieto,
penetrando en las sombras, y aventando
la duda oculta y el temor secreto.

Mira en la oscuridad
del sentimiento triste
el resplandor, no la fugacidad,
de la entrega que di y que me ofreciste.

Y cesará la luna
de sollozar nostálgicos olvidos,
porque no habrá ninguna,
ninguna otra mujer en mis gemidos.



Poema Canción De Unas Perdices Que Le Enviaron Vivas…(cancionero De Hernando Del Castillo-1511) de Florencia Pinar



Destas aves su nación
Es cantar con alegría,
Y de vellas en prisión
Siento yo grave pasion,
Sin sentir nadie la mía.

Ellas lloran que se vieron
Sin temor de ser cativas,
Y a quien eran más esquivas
Esos mismos las prendieron:
Sus nombres mi vida son
Que va perdiendo alegría,
Y de vellas en prision
Siento yo grave pasion,
Sin sentir nadie la mía.



Poema Canción De Una Dama Que Se Dice Florencia Pinar de Florencia Pinar



¡Ay! que hay quien mas no vive
porque no hay quien d?ay se duele,
y si hay, ¡ay! que recele
hay un ay con que s?esquive
quien sin ay vivir no suele.

Hay placeres, hay pesares,
hay glorias, hay mil dolores,
hay, donde hay penas de amores,
muy gran bien si dél gozares.

Aunque vida se cative
si hay quien tal ay consuele
no hay razón porque se cele,
aunque ay con que se esquive
quien sin ay vivir no suele.



Poema Cruz De Palomas de Fina García Marruz



Para Isabel, que me enseñó la basílica de San Clemente
(Mosaico del ábside, s. XII)

Creíamos que la cruz
era sólo de amargura
y ahora vemos las palomas
poblando sus travesaños.
(Verdad que es en San Clemente
y en el siglo de María.)
La cruz echa las raíces
de donde, en círculos magos,
nace la vida; los ciervos
beben el agua brotada
del Dolor; bajo su fronda
los hombres y las mujeres
se afanan en sus oficios,
y por las tablas nocturnas,
blanquísima, las palomas
caminan. Es su jardín.



Poema Como Un Romano de Fina García Marruz



Quién sirve
como un romano
-ese monarca
natural- una cena?

A quién no merma
jamás su oficio
sino alegría?

Rey, Guerrero,
Oficiante,
y Padre siempre.

Quién
-como si mandase-
sirve una copa?



Poema Cómo Ha Cambiado El Tiempo de Fina García Marruz



Amigo, el que yo más amaba,
venid a la luz del alba

Cómo ha cambiado el tiempo aquella fija
mirada inteligente que una extraña
ternura, como un sol, desdibujaba!
La música de lo posible rodeaba tu rostro,
como un ladrón el tiempo llevó sólo el despojo,
en nuestra fiel ternura te cumplías
como en lo ardido el fuego, y no en la lívida
ceniza, acaba. Y donde ven los otros
la arruga del escarnio, te tocamos
el traje adolescente, casi nieve
infantil a la mano, pues que sólo
nuestro fue el privilegio de mirarte
con el rostro de tu resurrección.



Poema Con Una Súbita Vehemencia (canción De Candilejas) de Fina García Marruz



Como irrumpen
atropelladas, sin medida,
las razones de un hombre tímido,
se agolpan esas cuatro o cinco notas
primeras, se contraen un instante inmedible,
y luego se remansan, persuasivas
como una declaración de amor,
que se fuera tornando una rara despedida.

En vano intentan
copiar esa tonada los rutinarios músicos.
Ellos repiten las mismas notas
pero entrando en un pausado ritmo regular
que las vuelve banales, diluidas,
sin esos silencios que se retardan,
sin esos cortes bruscos, esos
envalentonamientos adorables,
de viejo mimo que recuerda
la emoción del telón al descorrerse,
como aquel que sale
de un largo silencio, e ilusionado
con la amistad de la nieve tardía
y la primera hoja verde,
se decide, y rompe al fin a hablar,
con una súbita vehemencia.



Poema Cine Mudo de Fina García Marruz



No es que le falta
el sonido,

es que tiene
el silencio.



Poema Creencia (canción En Los Campos De Marte) de Fernando Rendón



La mariposa atrapada
entre la telaraña y el vidrio
creyó que mi mano que le daba la libertad
era su muerte

Su sorprendido aleteo hacia el cielo



Poema Convergencia de Fernando Rendón



Tirados como leños, la roja corteza arrugada, somos búfalos que se pudren derritiéndose sobre la pradera verde.

Pero también, debido a algo inexplicado, a un inigualable acto de azar, tirados como setas en la hierba, exploramos todos los milenios, huimos de bestias prehistóricas, peleamos todas las guerras, somos millones estirándonos bajo el arco iris de la eternidad, mientras combaten dragón y anhelo en las nubes.

El sol nos llama y titubear es morir. Vuela, vuelo bello cisne del deseo, todo se puede lograr.

Caminando sobre el blanco rocío, descálzate. La edad del hombre es la de su mirada sobre el bosque legendario.



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